APATIA A LO COTIDIANO

Siempre he dicho que las cosas pasan por algo, en mi caso el hecho de creerlo me ha traido cosas muy buenas y las malas las he digierido mejor con dicho pensamiento, a lo largo de mi vida me he visto con la fortuna de no tener que buscar trabajo, ya que mi vida laboral empezó muy chica (a los 15 años) es lógico que llegara a mi casa por conducto de un familiar en este caso una tia paterna, el trabajo constaba de cubrir un interinato por gravidez de una secretaria en una dependencia de gobierno, la experiencia la adquirí ahí ya que estaba recien egresada de la escuela, como toda primera vez, los nervios y el miedo a lo desconocido dejaban una sensación de hueco en el estomago, a ese empleo le siguieron esporádicamente otros interinatos mas, al grado de estar trabajando por un lapso de 2 años, pero ese no fué el único que llegó a casa, ya sea por medio de una amiga, o de la misma tia que se empeñaba en que trabajara... después me casé y el trabajo se centró en mi hogar, al separarme siguió la suerte de que el trabajo llegara a casa en tres ocasiones más, esta vez si bien contaba con un poco de experiencia laboral, el tiempo fuera de ese campo traía de nuevo temores nuevos, la tecnologia estaba muy avanzada y de nuevo ese huequito que desapareció en poco tiempo, ahí tuve mi primer contacto con este mágico mundo virtual... Después de un tiempo decidí empezar de cero, en una ciudad que si bien conocia por haber vivido en ella tiempo atrás, no habia rastro de lo que habia dejado ahí... en este tiempo que he estado aqui habia pospuesto el buscar empleo, en parte porque no era de una necesidad imperiosa, tal vez por temor y por creer que debido a mis constantes viajes para resolver mi situación legal no podia atenderlo como se requiere, una vez mas la suerte de siempre (el trabajo llega a casa) me encuentro en lo que quizá esperé en mis sueños locos de adolescente donde me imaginaba toda una ejecutiva de una gran empresa, saborear el nerviosismo de la entrevista me sorprende aún y más el poder que se desarrolla en ti al controlar ese nerviosismo y ponerte la careta de una profesional, la espera de esa llamada que te prometen hacer en dos dias mas, la emoción de recibirla antes de lo indicado diciendote que ya eres parte de la empresa, que eres parte de ellos, la capacitación que la empresa me da, me hace enamorarme cada dia mas de lo que estoy a punto de iniciar, hoy tuve la oportunidad de salir al campo de las ventas aún cuando no termino la capacitación... Acompañé a quien me invito a formar parte de ese grupo, si bien las ventas no estaban en mi esquema de trabajo, el formar parte de ese mundo mágico que es la radio, conocerla a fondo pues tienes que conocer lo que vas a ofrecer, sus locutores, sus genios de producción y creación de comerciales va mas allá de mi pobre imaginación, hoy puedo decir estoy viviendo un sueño, un sueño que crei perdido... hoy formo parte de una gran empresa, soy parte
CENTRO RADIOFONICO DE XALAPA!!!!